lunes, 10 de junio de 2013

Día mundial de la acuarela


El sábado 24 de noviembre de 2012, se celebró el Día Mundial de la Acuarela, y la AAV, nos convocó a todos los socios y alumnos a llenar con nuestros caballetes el espacio comprendido entre los Museos de Bellas Artes y Guggenheim, siendo la cita en este último a las 10 a.m.

Nos concentramos un grupo importante de acuarelistas. Pero el número de los que pintamos fue fluctuando a lo largo de la mañana en función del tiempo reinante. Día nublado, con chaparrones, lloviznas y claros. Muchos compañeros abandonaron por la lluvia a lo largo de la jornada.

Empecé trabajando en mi cuaderno Arches de 15 x 25, y como no llevaba asiento portátil, tuve que buscarme la vida.  Por eso elegí esta vista lateral del Guggenheim y del Puppy con el Hotel Dómine de cierre, porque el banco en el que me senté ( tumbé ), me ofrecía esa vista.

Cuando apenas había terminado con el lápiz, empezó a llover, y tuve que trasladarme a toda prisa al otro lado de la acera, bajo el toldo de una cafetería, donde lo pasé a tinta y comencé con la acuarela.

Cuando paró de llover, lo dejé de momento y traté de buscar a mis compañeros que se habían desperdigado en todas direcciones.



Guggenheim, Puppy y hotel Domine


En esta poco ortodoxa e incómoda postura dibujé el Puppy. Es la ventaja de trabajar con cuaderno.

Encontré un grupo importante de acuarelistas en los soportales de la Plaza Euskadi. Con sus caballetes plantados entre las columnas, después de algunas discusiones con los vigilantes de las fincas, que no querían que permaneciesen allí.

En un momento en que dejó de llover, encontré otro banco y desde allí hice mi segundo tema. Es la plaza de Euskadi, con la casa que hace esquina entre Ajuriaguerra y  Elcano y el Museo de Bellas Artes.


Plaza  de Euskadi

El problema es que los bancos no están en una posición cómoda frente al tema, sino lateral, y eso obliga a posturas poco naturales para trabajar.


Postura casi calcada a la anterior. Rotulador en mano


Hacia las dos, cuando el grupo ya se despedía, volví a mi primer lugar y desde el mismo punto, terminé la primera que aun no había acabado. Curiosamente, aunque había terminado el acto, seguían llegando compañeros, que no habían venido a pintar, sino a vernos y charlar con nosotros.

Creo que celebramos dignamente ese día mundial. Vi fotos de ese acto celebrado en todo el mundo. Y eso me gustó..... Tomé parte en algo que nos unió a muchos en muchos sitios. La acuarela une a personas sin distinción de sexos, países, idiomas, religiones, razas, etc.........



2 comentarios:

  1. El amor por nuestra aficion..........nos une a todos en ese dia tan bonito que tuvimos.........y que recordaremos...

    un abrazo apañero

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